Los alcaldes de Gáldar y Guía, Teodoro Sosa y Pedro Rodriguez, sellaron este sábado en el Teatro Consistorial de Gáldar el acuerdo de hermanamiento aprobado por las respectivas corporaciones municipales. Un hermanamiento que supone un pacto de amistad y colaboración entre ambas ciudades
, que busca consensuar un futuro en el que la cultura, la solidaridad y la propia economía puedan caminar de la mano, señalaron en sus intervenciones ambos alcaldes.
El Acto Institucional contó con el apoyo institucional del presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales quien destacó al cierre del acto la importancia histórica de Gáldar y Guía y defendió el papel de ambas ciudades en el proyecto de desarrollo de esta isla. También la presencia de los cronistas de ambas localidades y sobre todo los vecinos que arroparon con su presencia este hermanamiento y que como se señaló en el acto comparten desde siempre territorio, costumbres, fiestas y tradiciones, familias enteras de las dos localidades que han estado unidas por relaciones personales.
El concejal de Relaciones Institucionales, Agustín Martín, leyó el acuerdo plenario de aprobación de hermanamiento que se verá refrendado el 29 de julio en la ciudad de Guía.
En su intervención el alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa explicó que este hermanamiento lo hacemos para refozar la savia de una misma raíz «la de tantas familias de generaciones pasadas y presentes, la de tantos hijos e hijas de Gáldar y Guía que comparten no solo un territorio sino una memoria común, nuestra propia memoria histórica»
Precisamente de la historia de ambas ciudades habló el doctor Juan Sebastián López García cronista de Gáldar quien ofreció a los asistentes los antecedentes históricos y las conexiones que unen el territorio, la cultura y las tradiciones conjuntas.
Tras las palabras, Teodoro Sosa hizo entreda de la bandera de Gáldar al alcalde de Guía junto al pergamino que simboliza el hermanamiento. Tras el acto, ambas corporaciones acudieron al descubrimiento de un boceto que simboliza la historia de las dos ciudades, obra del artista Diego Higueras que se instaló en la calle Guayasén.